La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que Chile tiene una tasa de donación de 17 por 1.000 habitantes, siendo inferior a lo necesario y muy por debajo de otros países, que –en algunos casos- alcanzan a 31 personas por cada mil.
De allí que se apunte a tomar conciencia sobre la necesidad de contar con donantes voluntarios y altruistas, ya que la donación de una persona podría ayudar a salvar tres vidas, especialmente pacientes en riesgo vital, como recién nacidos, prematuros y adultos mayores. También es fundamental para mujeres con complicaciones obstétricas y para pacientes con intervenciones quirúrgicas complejas, enfermedades crónicas o que padecen algún tipo de cáncer.
La Dra. Carolina Silva, profesional de la Unidad de Salud Estudiantil de la Universidad de O’Higgins (UOH), explica que es importante la donación porque la sangre proveniente de donantes voluntarios altruistas repetidos “es más segura que aquella que se obtiene de familiares o amigos que deben reponer las unidades utilizadas en caso de emergencia. También porque la sangre es un recurso escaso, no se puede fabricar artificialmente, y la persona afectada sólo puede recibir sangre de otro humano compatible. Además, hay que considerar que -cada día- hay más enfermedades complejas que necesitan transfusiones, y la esperanza de vida en nuestro país es cada vez mayor, lo que aumenta las posibilidades de tener enfermedades que requieran componentes sanguíneos”.
¿Por qué escasean los donantes?
La Dra. Silva indica que la donación de sangre en nuestro país es altruista y no remunerada, “el donante no recibe compensación económica, lo que -en algunos casos- puede desincentivar la donación; además, en muchos lugares la atención es en horario hábil, lo que también interfiere para aquellos que trabajan o para quienes estudian. A lo que se suma el desconocimiento sobre las condiciones para ser donante. Por eso son fundamentales las campañas y estrategias para estimular a las personas a donar sangre”.
Mitos y realidades
La Dra. Carolina Silva explica que -previo a la donación- se realiza “una entrevista al posible donante, dado que se deben cumplir ciertos requisitos, tanto por su propia salud como para no exponer al posible receptor”.
Posteriormente, toda la sangre recibida pasa por un proceso de pruebas antes de llegar a sus destinatarios. “No existe riesgo de infección o contaminación para el donante, puesto que el material que se usa para la extracción es estéril y desechable, por lo tanto, no se puede contraer enfermedades por donar sangre”. Agrega que también se debe considerar que “el volumen de sangre donado (450 ml) se reemplaza –rápidamente- en nuestro organismo (24 horas) y la cantidad de glóbulos rojos vuelve a su nivel previo a la donación entre las 6 y 8 semanas. El llamado general es a informarnos de los requisitos y donar si cumplimos con lo requerido”.
Agrega que la donación constante es importante porque “la sangre tiene caducidad, los glóbulos rojos se deben transfundir dentro de 42 días y las plaquetas antes de 5 días, luego deben eliminarse. Además -agrega- el proceso que conlleva la preparación de los componentes sanguíneos y el estudio de la sangre, no es inmediato, por lo que -en un caso de emergencia- la sangre transfundida al paciente, no es la que se acaba de recibir de la donación sus familiares y amigos, sino que es parte de un stock que se requiere mantener, y así, contar con la cantidad de sangre necesaria para entregar a los pacientes cuando ellos la necesitan”.
Sobre si hay beneficios de ser donante, la médico indica que “si bien no hay beneficios económicos, sí existen beneficios para el donante, entre ellos, un control de signos vitales previo a la donación, que si está alterado permite que la persona tome acciones por su salud; además, se estimula la circulación sanguínea lo que mejora la salud cardiovascular, y también se estimula la producción de glóbulos rojos. Y lo más importante, salva vidas, una donación puede ayudar hasta tres personas, dado que la sangre extraída se fracciona en distintos componentes”.
Donación UOH
La Universidad de O’Higgins, en conjunto con el Hospital Regional Dr. Franco Ravera Zunino, organiza –periódicamente- campañas de donación móvil en los campus Rancagua y Colchagua de la casa de estudios, instando a la comunidad universitaria a sumarse a la donación altruista.